domingo, 25 de julio de 2010

Tu voz la sentí directamente en mi corazón y me hizo sentir como nunca me había sentido antes. Saciabas mi sed de felicidad. Ponías fin a mi sequía de emociones. Ya sólo tenía que esperar a que las antiguas heridas sanasen en esta tranquilidad. Pero tan sólo fue una mentira más.
A través de estos ojos distantes pude observar como las hojas del otoño caían. Mis manos perdidas en la clandestinidad, tratando de tocar algo que nunca lo fue. Este amor construido dentro de mí, pensé que duraría para siempre. Pero abusaste de mí, creíste que no podía sentir algo tan fuerte dentro de mi alma. Me pusiste a prueba pensando que esto era un juego más. Este corazón se ha cerrado para siempre. Todo el afecto ha sido negado. A través de mis lágrimas he probado y juzgado todo lo pasado. Mi paz ahora está entre las sombras de la depresión y la soledad. Nada más que el miedo es mi fiel acompañante en esta solitaria vida. Tu has traído a mí el amor y el dolor como nunca los he conocido antes. Pero también me hiciste dudar... si puede existir el verdadero amor para mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario